El CBD es un potente agente antiinflamatorio y puede ayudar a reducir el dolor. Se puede ingerir en forma de flores o aceites. También existen lociones y cremas que contienen CBD y que pueden aplicarse directamente en la zona del dolor. Estos productos pueden proporcionar un alivio rápido del dolor, así como beneficios de hidratación de la piel.
Aceite de cannabidiol
El aceite de CBD se utiliza para tratar el dolor en varias condiciones médicas. No es adictivo y no causa ninguna dependencia o abuso. El usuario no experimentará ningún síntoma durante la abstinencia.
Algunos investigadores creen que el CBD puede incluso ayudar a las personas a lidiar con la adicción. Si no está seguro de si el CBD es adecuado para usted, consulte a un médico.
El dolor crónico puede ser debilitante y dificultar la realización de tareas cotidianas o el disfrute de aficiones. Sin la ayuda de una buena estrategia de gestión del dolor, las personas pueden verse obligadas a tomar analgésicos con receta y otras formas de tratamiento que pueden causar graves efectos secundarios.
El CBD puede ayudar a controlar el dolor actuando como alternativa a los medicamentos de venta libre.
Los investigadores también han observado que el CBD actúa a través de los receptores vanilloides, que regulan el dolor causado por el calor o la inflamación.
Los estudios han demostrado que el CBD inhibe estos receptores modulándolos y reduciendo la cantidad de señales de dolor que se envían al cerebro.
Sin embargo, se necesita más investigación para entender cómo el CBD y otros cannabinoides interactúan con estos receptores.
Elegir el aceite de CBD adecuado para tus necesidades puede ser difícil. Hay cientos de tipos diferentes disponibles en el mercado. Elegir el adecuado para tus necesidades puede ser confuso, especialmente para las personas que no están familiarizadas con los beneficios del aceite de CBD para el dolor.
Estos producto no contiene gluten, son veganos. Se puede tomar por la mañana o antes de acostarse, y puede ayudarte a controlar el dolor en caso de problemas crónicos.
Gel de cannabidiol
Cuando el gel de CBD se aplica sobre la piel, tiene propiedades analgésicas. El CBD inhibe la actividad de varias dianas moleculares en el organismo, como los GPCR y los receptores de dopamina D2.
Además, actúa sobre los receptores ionotrópicos, como los canales de calcio y sodio, y los receptores 5-HT3A.
En los estudios, el CBD tiene efectos antiinflamatorios. Puede reducir la hinchazón y el dolor articular y ayudar a las personas con artritis a reducir los niveles de dolor.
También mejora la función física. La artritis afecta a más de 50 millones de adultos y a casi 300.000 niños. Según la Arthritis Foundation, el 29% de los enfermos de artritis afirman que el CBD les ayuda a controlar sus síntomas.
Además de aliviar el dolor, el CBD es una gran forma de reducir la inflamación y la ansiedad. También alivia el estrés, lo que puede ayudar a las personas a dormir mejor.
Hay una variedad de formas de consumir el CBD. Muchos productos tópicos prometen aliviar el dolor y el malestar. Sin embargo, la concentración de CBD suele ser baja en estos productos. A menudo, el efecto calmante se debe en realidad a otros ingredientes.
Por esta razón, es importante leer la lista de ingredientes y buscar un certificado de análisis que muestre la concentración de CBD.
Algunos estudios han demostrado que el CBD puede aliviar el dolor asociado a las enfermedades autoinmunes y a la esclerosis múltiple. En los ensayos clínicos, este tratamiento natural ha mejorado la calidad de vida de los pacientes con estas enfermedades.
La cantidad de CBD y la vía de administración influyen en el alcance del efecto analgésico.